¡Hola, animal emocional! Hoy te quiero contar más acerca de mi trabajo en las empresas. Probablemente me sigas por redes y te preguntes si ofrezco cursos en compañías. La respuesta es sí! Y es una parte de mi trabajo con la que disfruto muchísimo. ¿Te apetece saber más?
5 claves por las que toda empresa debería ofrecer talleres de meditación a sus empleados
Desde que comenzó la pandemia mi trabajo en el área corporativa ha cambiado de una manera muy llamativa. De repente, las empresas con las que trabajaba salud emocional, comunicación no violenta o desarrollo de liderazgo empezaron a ver que sus empleados necesitaban otro tipo de talleres. La fatiga pandémica había llegado a sus vidas y lo que antes parecía algo superfluo, como un taller de respiración o de meditación, ahora era esencial para poder hacer frente al día a día, a la incertidumbre y a la ansiedad.
Por eso, empecé a ofrecer talleres de meditación personalizados.
A lo largo de mi vida adulta, me he visto necesitada de ayuda muchas veces. En pandemia no podía ser menos. El necesitar ayuda, sin embargo, no me hace sentir genial. Necesitarla me ha hecho toparme con mi vulnerabilidad de cara en miles de ocasiones y me ha recordado de manera abrupta que hay cosas que no las puedo superar yo sola por mucha terapeuta que sea. He tenido tentaciones de pensar aquello que nos han vendido tanto del “esto ya pasará” o lo peor: “esto lo soluciono yo sola”. Queridas todoterreno, esa técnica no siempre funciona. Pero “nice try”.
Desde mi experiencia como formadora, siempre he querido ayudar a las compañías a empoderarse emocionalmente y mi apuesta es clara: no existe un empleado contento si no está sintiendo que su empresa se preocupa por él. La fidelidad, la sensación de pertenencia y la seguridad psicológica son claves en este momento de la historia.
Hoy he reunido las cinco claves por las que toda empresa debería ofrecer talleres de meditación a sus empleados:
1. Mejora de la salud mental del empleado
Nuestra salud emocional está sufriendo a causa de una situación mundial en la que la incertidumbre es clara. La meditación (mindfulness) aporta unos conocimientos de cómo nuestro cuerpo reacciona ante el estrés y nos ayuda a poder gestionar estos momentos. Mediante la gestión de nuestra respiración, la ansiedad se minimiza por lo que podemos gozar de una salud mental que nos permita una mente clara que no se deja llevar por un tsunami de emociones como el miedo, la angustia o la ira.
2. Aumenta la fidelización de los empleados
Las encuestas que me llegan al final del curso así lo indican. Los trabajadores dicen que están más satisfechos con la compañía y que le agradecen haber invertido en esta formación. Creo que, en este caso, las palabras hablan por sí mismas.
3. ¡No solo meditamos! Los talleres se adaptan a las necesidades de las compañías
Algunas compañías me llaman diciendo que les preocupa que el taller sea presencial o que no pueda satisfacer las necesidades de todos los empleados. Por eso es tan importante la reunión previa con el departamento de RRHH para entendernos y conocernos y adaptar el taller al formato que la compañía y los empleados necesiten. De estas reuniones han salido formaciones extra sobre curiosidades de la meditación, clases teóricas divertidas y conocimientos anatómicos y científicos. El qué y el cómo deben ir acompañados.
4. Fomenta la unión entre equipos
Los talleres sirven para que los empleados también puedan expresarse y no hay nada como ver que un compañero tuyo tiene el mismo problema que tú para sentir empatía y crear lazos de unión. La empatía en los equipos es una asignatura pendiente y este es uno de los recursos que pueden ayudar.
5. Los empleados valoran talleres que les aportan recursos también para su vida privada
Este punto te sorprenderá, pero es uno de los feedback que más me llegan y que más me conmueven. El empleado queda muy agradecido por haber aprendido una técnica que le empodera también positivamente en su día a día y que “puede llevarse a casa”.
Si necesitas más información sobre este tipo de cursos, no dudes en contactarme por Whatsapp o email. Recuerda que cada pasito que damos en nuestro conocimiento emocional y personal es un gran paso para el desarrollo humano en nuestra sociedad. Una empresa tiene una labor social infinita.
¡Gracias por leerme, animal emocional!
